How does it feel to be... like a rolling stone?

Ayer regresé de mi viaje relámpago a Queretaro, de ver a mi probable futuro asesor de Doctorado. Por fuerte que suene, no sentí miedo o nervios mientras que iba a verlo, ni antes. Fue hasta que llegué y lo ví sentado en su computadora que sentí nervios y miedo, tanto que mi inglés se fue, así, desaparecio por completo. Durante dos horas no le pude decir nada coherente [No fue como con las suecas]. Hasta la comida me salió el inglés, y qué bueno, hubiera sido una catrástofe que creyera que no podía hablar inglés.

Lo primero que hizo fue ponerme los pies en tierra. Hablamos de temas administrativos y de posibles planes alternativos que pueden funcionar si no consigo la beca. Es bueno saber que tengo un plan B si me quedo en México. Por fin habrá politoperos en México!!!!!

Ayer fue lo mejor del viaje. Con un ingles mas fluido de mi parte, hablamos de posibles temas para el Doctorado. Lo mejor de todo es que podré regresar a la topología; aunque oficialmente me podrían catalogar como Geometra combinatorio, siempre he querido entrarle a la topología. Ademas, siempre me han gustado los temas multidiciplinarios, digo, para no acabar encajonado y estudiando una garra de la pata derecha superior de un león en Zimbabwe, el tema combina muy bien la combinatoria con la topología.

En fin, regresé con un chingo de chamba y tengo fecha limite para acabar mi tesis. Lo cual esta bien, pues si no me presiono, jamás la acabo.